Con todo eso, si alguno quiere ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios.
que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.
y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.
no atendiendo a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad.
Pero evita las cuestiones necias, y genealogías, y contenciones, y discusiones acerca de la ley; porque son vanas y sin provecho.