En Dios está mi salvación y mi gloria; En Dios está mi roca fuerte, y mi refugio.
Nuestros pies estuvieron Dentro de tus puertas, oh Jerusalén.
Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.