Por tanto, él hará notorias las obras de ellos, Cuando los trastorne en la noche, y sean quebrantados.
Como pasa el torbellino, así el malo no permanece; Mas el justo permanece para siempre.
Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca.