Viéndose Jesús rodeado de mucha gente, mandó pasar al otro lado.
Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo.
Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas.
Cuando se alejó de la multitud y entró en casa, le preguntaron sus discípulos sobre la parábola.
Y le seguía gran multitud, porque veían las señales que hacía en los enfermos.
Entonces subió Jesús a un monte, y se sentó allí con sus discípulos.
Pero entendiendo Jesús que iban a venir para apoderarse de él y hacerle rey, volvió a retirarse al monte él solo.