Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes,
y les dijo: їQué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata.
Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle.
Y también Judas, el que le entregaba, conocía aquel lugar, porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos.
Judas, pues, tomando una compañía de soldados, y alguaciles de los principales sacerdotes y de los fariseos, fue allí con linternas y antorchas, y con armas.