He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos, Ni se puede seguir la huella de sus años.
Prometed, y pagad a Jehová vuestro Dios; Todos los que están alrededor de él, traigan ofrendas al Temible.
Para siempre confirmaré tu descendencia, Y edificaré tu trono por todas las generaciones. Selah
Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.