Jehová, hasta los cielos llega tu misericordia, Y tu fidelidad alcanza hasta las nubes.
De mañana sácianos de tu misericordia, Y cantaremos y nos alegraremos todos nuestros días.
Confió en Dios; líbrele ahora si le quiere; porque ha dicho: Soy Hijo de Dios.
Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.