Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia,
Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guarde mis mandamientos;
Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.
Mejor es adquirir sabiduría que oro preciado; Y adquirir inteligencia vale más que la plata.