Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,
El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco.
Tarde o temprano, el malo será castigado; Mas la descendencia de los justos será librada.
Entonces les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos delante de los hombres; mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es abominación.