Y entendiéndolo Jesús, les dijo: їPor qué pensáis dentro de vosotros, hombres de poca fe, que no tenéis pan?
Mas él conocía los pensamientos de ellos; y dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate, y ponte en medio. Y él, levantándose, se puso en pie.
Y Jesús, percibiendo los pensamientos de sus corazones, tomó a un niño y lo puso junto a sí,