Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
Entonces Jesús le dijo: Mira, no lo digas a nadie; sino ve, muéstrate al sacerdote, y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para testimonio a ellos.
Y clamaron diciendo: їQué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? їHas venido acá para atormentarnos antes de tiempo?
Y los espíritus inmundos, al verle, se postraban delante de él, y daban voces, diciendo: Tú eres el Hijo de Dios.
diciendo: Déjanos; їqué tienes con nosotros, Jesús nazareno? їHas venido para destruirnos? Yo te conozco quién eres, el Santo de Dios.