Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la tierra.
Al músico principal. Salmo de David. Oh Dios de mi alabanza, no calles;
Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.
Pues, їa cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?
Todo lo sujetaste bajo sus pies. Porque en cuanto le sujetó todas las cosas, nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos que todas las cosas le sean sujetas.