Él guarda los pies de sus santos, Mas los impíos perecen en tinieblas; Porque nadie será fuerte por su propia fuerza.
Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.
Visitas la tierra, y la riegas; En gran manera la enriqueces; Con el río de Dios, lleno de aguas, Preparas el grano de ellos, cuando así la dispones.
їQuién conoce el poder de tu ira, Y tu indignación según que debes ser temido?
Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría.
Cántico gradual. Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan.
Entonces andarás por tu camino confiadamente, Y tu pie no tropezará.
Porque Jehová será tu confianza, Y él preservará tu pie de quedar preso.
Yo Jehová la guardo, cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe.