¡Generación de víboras! їCómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.
Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.