Y Ocozías cayó por la ventana de una sala de la casa que tenía en Samaria; y estando enfermo, envió mensajeros, y les dijo: Id y consultad a Baal-zebub dios de Ecrón, si he de sanar de esta mi enfermedad.
Pero los fariseos decían: Por el príncipe de los demonios echa fuera los demonios.
Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzeb, їcuánto más a los de su casa?
Respondió la multitud y dijo: Demonio tienes; їquién procura matarte?
Entonces los judíos le dijeron: Ahora conocemos que tienes demonio. Abraham murió, y los profetas; y tú dices: El que guarda mi palabra, nunca sufrirá muerte.
Muchos de ellos decían: Demonio tiene, y está fuera de sí; їpor qué le oís?