El que tiene oídos para oír, oiga.
Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.
Entonces les dijo: El que tiene oídos para oír, oiga.
Ni para la tierra ni para el muladar es útil; la arrojan fuera. El que tiene oídos para oír, oiga.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.