їHa cesado para siempre su misericordia? їSe ha acabado perpetuamente su promesa?
Y los corderos serán apacentados según su costumbre; y extraños devorarán los campos desolados de los ricos.
Y a todos los montes que se cavaban con azada, no llegarán allá por el temor de los espinos y de los cardos, sino que serán para pasto de bueyes y para ser hollados de los ganados.