El octavo día tendréis solemnidad; ninguna obra de siervos haréis.cuando obedecieres a la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos escritos en este libro de la ley; cuando te convirtieres a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.Porque este mandamiento que yo te ordeno hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos.