Pero yo he puesto mi rey Sobre Sion, mi santo monte.
Como prodigio he sido a muchos, Y tú mi refugio fuerte.
Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra.
Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soy.
Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.