Encontré asimismo que las porciones para los levitas no les habían sido dadas, y que los levitas y cantores que hacían el servicio habían huido cada uno a su heredad.
Entonces reprendí a los oficiales, y dije: їPor qué está la casa de Dios abandonada? Y los reuní y los puse en sus puestos.
Y todo Judá trajo el diezmo del grano, del vino y del aceite, a los almacenes.