La destroza el puerco montés, Y la bestia del campo la devora.
Os echaré de mi presencia, como eché a todos vuestros hermanos, a toda la generación de Efraín.
Como uvas en el desierto hallé a Israel; como la fruta temprana de la higuera en su principio vi a vuestros padres. Ellos acudieron a Baal-peor, se apartaron para vergüenza, y se hicieron abominables como aquello que amaron.