El que confía en sus riquezas caerá; Mas los justos reverdecerán como ramas.
Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo.
Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.
Pero vosotros habéis afrentado al pobre. їNo os oprimen los ricos, y no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales?
Afligíos, y lamentad, y llorad. Vuestra risa se convierta en lloro, y vuestro gozo en tristeza.