Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
como el que fuere con su prójimo al monte a cortar leña, y al dar su mano el golpe con el hacha para cortar algún leño, saltare el hierro del cabo, y diere contra su prójimo y éste muriere; aquél huirá a una de estas ciudades, y vivirá;
no sea que el vengador de la sangre, enfurecido, persiga al homicida, y le alcance por ser largo el camino, y le hiera de muerte, no debiendo ser condenado a muerte por cuanto no tenía enemistad con su prójimo anteriormente.
Por tanto yo te mando, diciendo: Separarás tres ciudades.
Y si Jehová tu Dios ensanchare tu territorio, como lo juró a tus padres, y te diere toda la tierra que prometió dar a tus padres,
Tales son los caminos de todos los que olvidan a Dios; Y la esperanza del impío perecerá;
Porque su esperanza será cortada, Y su confianza es tela de araña.
Se apoyará él en su casa, mas no permanecerá ella en pie; Se asirá de ella, mas no resistirá.
A manera de un árbol está verde delante del sol, Y sus renuevos salen sobre su huerto;
Se van entretejiendo sus raíces junto a una fuente, Y enlazándose hasta un lugar pedregoso.
Si le arrancaren de su lugar, Este le negará entonces, diciendo: Nunca te vi.
Ciertamente este será el gozo de su camino; Y del polvo mismo nacerán otros.
Al músico principal. Salmo de David, siervo de Jehová. La iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos.
Se lisonjea, por tanto, en sus propios ojos, De que su iniquidad no será hallada y aborrecida.
Las palabras de su boca son iniquidad y fraude; Ha dejado de ser cuerdo y de hacer el bien.
Medita maldad sobre su cama; Está en camino no bueno, El mal no aborrece.
Jehová, hasta los cielos llega tu misericordia, Y tu fidelidad alcanza hasta las nubes.
Tu justicia es como los montes de Dios, Tus juicios, abismo grande. Oh Jehová, al hombre y al animal conservas.
Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad.
їQuién sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y que el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?