y dijo: Bendito sea Jehová, Dios de mi amo Abraham, que no apartó de mi amo su misericordia y su verdad, guiándome Jehová en el camino a casa de los hermanos de mi amo.
Y entró el rey David y se puso delante de Jehová, y dijo: Señor Jehová, їquién soy yo, y qué es mi casa, para que tú me hayas traído hasta aquí?
Y aunque tu principio haya sido pequeño, Tu postrer estado será muy grande.