Hechos de los apóstoles 20:33
La casa y las riquezas son herencia de los padres; Mas de Jehová la mujer prudente.
Ni plata ni oro ni vestido de nadie he codiciado.
No escribo esto para avergonzaros, sino para amonestaros como a hijos míos amados.
Porque aunque tengáis diez mil ayos en Cristo, no tendréis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio.
Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.
como también yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos.
Esta es la tercera vez que voy a vosotros. Por boca de dos o de tres testigos se decidirá todo asunto.