Hechos de los apóstoles 14:17
Que da la lluvia sobre la faz de la tierra, Y envía las aguas sobre los campos;
Haciendo llover sobre la tierra deshabitada, Sobre el desierto, donde no hay hombre,
Para saciar la tierra desierta e inculta, Y para hacer brotar la tierna hierba?
Porque él conoce nuestra condición; Se acuerda de que somos polvo.
El hombre, como la hierba son sus días; Florece como la flor del campo,
si bien no se dejó a sí mismo sin testimonio, haciendo bien, dándonos lluvias del cielo y tiempos fructíferos, llenando de sustento y de alegría nuestros corazones.