Por haberse puesto al frente los caudillos en Israel, Por haberse ofrecido voluntariamente el pueblo, Load a Jehová.
Donde me tentaron vuestros padres, Me probaron, y vieron mis obras.
Pues se da testimonio de él: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec.
Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer.