Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen;
y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
comprobando lo que es agradable al Señor.
el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre,
como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia;
No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.