їHa olvidado Dios el tener misericordia? їHa encerrado con ira sus piedades? Selah
Derramaron su sangre como agua en los alrededores de Jerusalén, Y no hubo quien los enterrase.
Dijo entonces Isaías: Oíd ahora, casa de David. їOs es poco el ser molestos a los hombres, sino que también lo seáis a mi Dios?
No llaméis conspiración a todas las cosas que este pueblo llama conspiración; ni temáis lo que ellos temen, ni tengáis miedo.