La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo.
Volverán a la tarde, ladrarán como perros, Y rodearán la ciudad.
Los dirigió por camino derecho, Para que viniesen a ciudad habitable.
Y vio que no había hombre, y se maravilló que no hubiera quien se interpusiese; y lo salvó su brazo, y le afirmó su misma justicia.