Hechos de los apóstoles 9:14
En mi prosperidad dije yo: No seré jamás conmovido,
Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiró.
y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre.