їQuién como tú, oh Jehová, entre los dioses? їQuién como tú, magnífico en santidad, Terrible en maravillosas hazañas, hacedor de prodigios?
Señor Jehová, tú has comenzado a mostrar a tu siervo tu grandeza, y tu mano poderosa; porque їqué dios hay en el cielo ni en la tierra que haga obras y proezas como las tuyas?
Y la casa que tengo que edificar, ha de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses.
Plegaria pidiendo vindicación y liberación Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa; Líbrame de gente impía, y del hombre engañoso e inicuo.
Escucharé lo que hablará Jehová Dios; Porque hablará paz a su pueblo y a sus santos, Para que no se vuelvan a la locura.
La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron.
Porque en su mano están las profundidades de la tierra, Y las alturas de los montes son suyas.
Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste,
No hay semejante a ti, oh Jehová; grande eres tú, y grande tu nombre en poderío.
Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos señores),
para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.