Entonces el rey David dijo a Ornán: No, sino que efectivamente la compraré por su justo precio; porque no tomaré para Jehová lo que es tuyo, ni sacrificaré holocausto que nada me cueste.
Y dio David a Ornán por aquel lugar el peso de seiscientos siclos de oro.
їCon qué me presentaré ante Jehová, y adoraré al Dios Altísimo? їMe presentaré ante él con holocaustos, con becerros de un año?
їSe agradará Jehová de millares de carneros, o de diez mil arroyos de aceite? їDaré mi primogénito por mi rebelión, el fruto de mis entrañas por el pecado de mi alma?