De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras.
Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme.
Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio,
Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano.