dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.
Y David mi padre tuvo en su corazón edificar casa al nombre de Jehová Dios de Israel.
Aconteció que morando David en su casa, dijo David al profeta Natán: He aquí yo habito en casa de cedro, y el arca del pacto de Jehová debajo de cortinas.
Y Natán dijo a David: Haz todo lo que está en tu corazón, porque Dios está contigo.
Cántico gradual; de David. Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí.
En verdad que me he comportado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma.
Espera, oh Israel, en Jehová, Desde ahora y para siempre.