їNo debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.